Una Sociedad de Artistas
Pineda se traslada a Madrid, donde residen desde hace años varios e influyentes nudos de La Cuerda como Fernández Jiménez, Juan Facundo Riaño o el propio Giner de los Ríos que introducirían al Maestro Vílchez en los ambientes artísticos de la ciudad. En agosto de 1867 su nombre aparece en el Registro de Copiantes del Museo del Prado. Pineda de inscribe en el registro el 3 de agosto de 1867.
El registro era un sistema de control, que autorizaba a los pintores a copiar a los grandes maestros cuyas obras se exhibían en el Museo y un intento de frenar las falsificaciones que proliferaban en aquella época en el mercado del arte de Madrid.
Uno de sus primeros trabajos en Madrid es como ilustrador de personajes ilustres de España, como es el caso del político Cea Bermúdez, en la editorial Litografía Nueva. Continúa Pineda con esta colaboración litográfica en la empresa Litografía Heráldica con la reproducción del retrato del Conde de Torreorgaz, Miguel Jalón y Larragoiti y del político y parlamentario liberal almeriense, Francisco Jover y Berruezo.
 Francisco Jover y Berruezo y Miguel Jalón Larragoiti. Litografía Heráldica. |
El Grabador al Aguafuerte publicó dos tomos completos de 48 estampas repartidos en doce entregas anuales durante los años 1874 y 1875. La colección quedó interrumpida en la estampa número 36 del tercer tomo en el año 1877. La Sociedad de Artistas, creada al efecto para realizar este trabajo dirigió su creación al coleccionista moderno de estampas. Fue el primer intento español con la pretensión de individualizar cada estampa como obra de arte. Este hecho fue motivo de ardua polémica entre grabadores y pintores en los años finales del siglo XIX.
Pineda entra en contacto con esta Sociedad de Artistas y Grabadores, hacia el año 1876. Esta Sociedad trabaja para la Calcografía Nacional. La Calcografía Nacional estuvo dedicada a la conservación, promoción y difusión del arte gráfico. Fue creada en 1789 con el objeto de tener un establecimiento fijo anexionado a la Imprenta Real que centralizará todos los encargos demandados por el gobierno a través de las distintas secretarías del Estado. Mediante la creación de un establecimiento propio se pretendía acometer importantes proyectos de grabado surgidos en el marco de la política ilustrada. Asimismo la nueva institución debía recoger, conservar y, si era necesario, estampar de nuevo todas las láminas de cobre que se habían grabado por orden regia.
El pintor abderitano, se integra en este grupo de artistas grabadores en 1876, y recibe el encargo de la reproducción de siete estampas de una serie de cuadros de Velázquez: Los Borrachos ó el Triunfo de Baco, Marte, El Primo, El Niño de Vallecas, La Infanta Doña María, Reina de Hungría, Estudio de Cabeza de Viejo y Busto de Felipe IV.
Por orden cronológico la estampa de Marte es la primera. Está realizada con la técnica del aguafuerte con una huella de plancha de 265 X 134 mm. En la obra aparece Marte sentado y desnudo con morrón, paño arrebujado en el vientre y manto que cae al suelo. A su pié el escudo y otras piezas de armadura.
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Marte. |
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La sexta lámina es la titulada Busto de Felipe IV. Es una creación en aguafuerte, sobre una huella de plancha de 221 X 138 mm.
La séptima y última lámina realizada por el grabador abderitano se titula Estudio de Cabeza de Viejo. Es una obra realizada en aguafuerte y aguatinta, sobre una huella de plancha de 134 X 98 mm.
El primer tomo del Grabador recoge las doce entregas del año 1874, con un total de 48 estampas. Del total, 25 fueron invenciones originales. Doce debidas a Francisco Torras Armengol, nueve a Martínez Espinosa y dos de José María Galván. Las obras reproducidas de los grandes maestros de la pintura son cuadros de Velázquez, Ribera, Goya, Murillo, Zurbarán y Pereda entre otros. La elección de las obras se decanta por reproducir estampas de pinturas que no habían sido divulgadas con anterioridad.
El segundo volumen tuvo un desarrollo muy parecido al primero. Lo constituyen 48 estampas divididas en doce entregas. Se realizaron 21 aguafuertes originales, obra de Torras y Martínez Espinosa en su mayoría con un total de 17 láminas. Galván solo realizó una obra original de las doce que editó en ese año de 1875. Destaca la incorporación de Rafael Monleón y de Juan Closas.
Entre los temas de reproducción, Goya continúa siendo uno de los pintores más copiados, con las estampas de los acontecimientos del 2 de mayo de 1808. Velázquez continúa dominando la publicación pues entre este tomo y el tercero fueron veintidós los cuadros de su autoría llevados al grabado.
El Grabador al Aguafuerte comienza su tercer año en 1876, pero su tercer y último volumen no se llegó a completar ya que salieron treinta y seis estampas. En total, ocho entregas de las cuales doce estampas fueron realizadas por tres artistas ajenos a la Sociedad original: Ignacio Tubau, Eugenio Lemus y Miguel Pineda Montón. Pineda reprodujo, como es sabido, un total de siete cuadros del pintor sevillano del siglo XVII en otras tantas estampas, repartidas entre La Calcografía Nacional, con sede en el Museo de la Real Escuela de Bellas Artes de San Fernando y la Colección de Estampas del Museo del Prado.
La Calcografía se nutrió en aquellos años de las planchas de los ganadores de los premios de las exposiciones nacionales y de los que trabajaron para las colecciones del Grabador al Aguafuerte, con el objeto de dotar a todos los centros oficiales del país de grabados de reproducción para adornar despachos y pasillos.
El Grabador al Aguafuerte publicó en total 132 estampas. Además de reproducciones de las obras de los antiguos maestros y de otros grandes artistas contemporáneos del siglo XIX como Goya o Fortuny, fueron objeto del trabajo de esta Sociedad de Artistas obras de los principales museos, cuadros de galerías particulares y dibujos originales de notable interés. Se publicaron en total 26 reproducciones de pinturas de Velázquez mediante el aguafuerte de interpretación, como hemos visto, muchas de ellas realizadas por Pineda.
